¿Para qué nos sirve aprender las capas y señales aparte de superar el examen de galope 1 y 2?
Aprenderse las capas y las señales nos va a ayudar a diferenciar a unos caballos de otros y a referirnos a ellos con corrección.
En esta entrada os vamos a compartir y explicar las capas y señales que se piden en los exámenes de galopes 1 y 2.
Hay algunas capas más que no entran en el temario y os las mostraremos en otra publicación más adelante.
Las capas del galope 1:
Castaño:
Capa de color marrón, en la que encontramos tonalidades desde el castaño claro al oscuro, teniendo como denominador común entre todas las variantes, los cabos, o extremidades, crin y cola de color negro. Esta cualidad nos ayudará mucho a diferenciar a los castaños de la siguiente capa que veremos, los alazanes.
Alazán:
Esta capa tiene una tonalidad más rojiza o anaranjada que los castaños, sería salvando mucho las distancias, los pelirrojos de los caballos.
Otra característica de esta capa es que la cola, crin y extremidades son del mismo color o más claro que el cuerpo, a diferencia de los castaños que como veíamos antes eran de color negro.
Negro:
Este no tiene mucha dificultad. Cuerpo y crines de color negro.
Tordo:
A los caballos tordos se los denomina erroneamente blancos.
Es imposible cambiarlo. Para el resto del mundo los caballos son blancos, no tordos. Pero para nosotros, en el mundo ecuestre, es de obligado uso la palabra tordo.
Más que una capa, es una familia de capas. Existe una gran variedad, que en futuras publicaciones compartiremos, de momento nos quedamos con una pequeña definición.
Son caballos generalmente de color gris, mezcla de pelos negros y grises que con el paso del tiempo sufren una progresiva despignentación y van aclarando el color, quedando de adultos de color blanco, llamado tordo terminal.
Pio:
El pio es una capa de las llamadas binarias, ya que la van a conformar dos colores.
Estos dos colores no van a aparecer en una localización o de una manera similar en los caballos pios, si no que pueden darse en infinidad de formas.
De los dos colores que conforman esta capa, el blanco siempre va a estar presente de manera predominante, pudíendose combinar con el castaño, negro, alazán, isabela e incluso con el tordo. Esta última combinación no es muy frecuente, además que con el paso del tiempo, como hemos visto antes, el tordo va perdiendo la pigmentación, quedando blanco el caballo entero.
Palomino:
También conocida como isabela, es una capa de color amarillento, o dorado con la cola, crin y tupé de color blanco o muy claras casi blancas.
Apaloosa:
Capa muy variada, en la que generalmente tenemos un color base, blanco, castaño claro o negro y otro color en forma de motas o lunares grandes. Hay otras varientes, pero de momento en el galope uno nos quedamos aquí.
Hay que tener clara la diferencia que hay con el pío. El apaloosa tiene dos colores, de los cuales un es en forma de motas o puntos no muy grandes y en el pío las fromas son muy grandes e irregulares.
Las señales del Galope 2:
Las capas que hemos visto en el comienzo del artículo pueden tener algunos matices, particularidades, que hacen diferentes a unos caballos de otros. Estos matices se llaman señales y entran dentro del temario de capas y señales para los galopes.
A continuación vamos a ver las señales que entran en el galope 2.
Cordón corrido:
Mancha de pelos blancos en forma de ralla que va, normalmente de la frente hasta la nariz. Normalmente son estrechas.
Estrella:
También llamado lucero, normalmente de forma circular, de color blanco como el cordón y situado en la frente del caballo.
Calzado:
Aparece en la extremidades. No hay que confundirlo con las extremidades blancas en los píos.
Es una mancha blanca que rodea toda la extremidad.
Puede darse en una, dos, tres o las cuatro extremidades y la altura puede ir desde la corona, hasta la rodilla o corvejón.
Ralla de mulo:
Línea de pelos de color oscuro, que recorre la la columna del caballo desde la cruz hasta la cola.
Esperamos que este artículo os haya ayudado para prepararos las capas y señales del los galopes.
